Hace algo más de dos años, el mundo cambió. De la noche a la mañana, dimos un giro radical a nuestra existencia. No hay mucho que añadir al respecto; todos vivimos ese momento. Cada uno a su manera. Es lo que tienen las pandemias, te cambia.
De todas las cosas que cambiaron por aquel entonces, algunas se han quedado para siempre y otras han ido diluyéndose por el camino. Lo que parecía que iba a convertirse en un giro para la humanidad, ha quedado en solo una desviación. Un cambio importante que al final no fue tanto. Va quedando atrás la distancia social, el confinamiento, las cuarentenas imposibles o todas esas restricciones incongruentes.
Se tomaron muchas medidas de seguridad de las que nos queda y quedará ya para los restos, el uso de gel hidroalcohólico. Este producto que se ha convertido en aliado para combatir a los enemigos víricos y bacterianos, sigue siendo un top ventas. Así lo confirman desde Stocknet: el coronavirus sigue con nosotros y el gel hidroalcohólico también lo hará.
Este tipo de geles lleva mucho más tiempo entre nosotros, recordemos la gripe A hace más de una década. Sin embargo su mayor auge vino en el 2020. A pesar de ser nuestro compañero inseparable o el guardián de todas las puertas y accesos, ¿que sabemos de este producto?
Existen dos tipos de gel hidroalcohólico, el de carácter cosmético y el de carácter biocida. Cada uno con sus propiedades e indicaciones concretas.
Variedades y funciones del gel hidroalcohólico
El uso que se le viene dando en la actualidad es el de antiséptico para piel sana, es decir libre de heridas o afecciones. Su finalidad es la desinfección de las manos cuando se hallan expuestas a patógenos de cualquier tipo, independientemente del ámbito, doméstico o sanitario.
Debido a su carácter biocida y que están desarrollados para destruir y neutralizar elementos nocivos, tienen un marco legal propio. Lo que viene a ser que están regulados por la ley y tienen que cumplir una serie de parámetros y normativas para poder estar en el mercado.
Su evaluación, autorización y registro, corresponde a la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Aquellos cuyos componentes han sido revisados y aprobados pasan a ser competencia de la Dirección General de Salud Pública, Calidad e Innovación (DGSP). Se regulan por el Real Decreto 3349/83 y el Real Decreto 1054/2002. Los que contienen sustancias activas que se mencionan en el Reglamento (UE) nº 528/2012 pasan a la Lista quedando reguladas por el mismo Reglamento.
En cuanto al gel hidroalcohólico de carácter cosmético, su uso está destinado para el lavado de manos en condiciones normales y en las que no se dispone de agua y jabón. Limpia pero no desinfecta.
Su marco legal es diferente y su regulación pasa por dos Reglamentos y un Real Decreto:
- REGLAMENTO (CE) 1223/2009 del Parlamento Europeo y del Consejo sobre los productos cosmético
- REGLAMENTO (UE) Nº 655/2013 de la Comisión, de 10 de julio de 2013
- REAL DECRETO 85/2018 de 23 de febrero, por el que se regulan los productos cosméticos.
Como saber cual elegir
Según el uso que quieras dar al gel hidroalcohólico deberás elegir uno u otro. Actualmente la mayoría buscamos el antiséptico que es el adecuado para la situación postpandémica que vivimos.
En el mercado es fácil distinguirlos ya que en el etiquetado de un gel biocida, deberá constar una mención a su uso antiséptico para piel sana. No debe faltar el número de registro y los microorganismos contra los que es eficaz.
Cuando se trata de un gel hidroalcohólico de uso cosmético, no debe constar en su etiqueta ninguna de esas propiedades. Tan solo que su uso está destinado a la limpieza de manos.
Si tienes alguna duda sobre si el gel que has comprado es de uno u otro tipo, siempre puedes consultarlo en la página web de la AEMPS.
Hazlo tú mismo
Seguro que ya lo sabes o lo has visto alguna vez en algún momento de la pandemia. No obstante por si te quedas sin gel y eres de las personas que no puede vivir sin el aquí te dejo unos pasos para que te fabriques tu propio gel hidroalcohólico en casa.
Los materiales que necesitas son bastante fáciles de encontrar:
- 90 centímetros cúbicos de agua.
- 250 mililitros de alcohol.
- 25 mililitros de glicerina.
- Bote de jabón de manos vacío.
El primer paso es poner el alcohol en el bote de jabón, a esto le añadimos el agua cuya misión es rebajar el alcohol. Por último, añadimos la glicerina según el espesor o fluidez que pretendamos obtener. Este ingrediente sirve para que la mezcla no resulte tan agresiva para la piel y ayude con la hidratación. Agitamos bien y ya tenemos nuestro gel hidroalcohólico casero.
Aunque su uso ha sido siempre en virtud de protegernos de la Covid, su aplicación es válida para cualquier otro tipo de patógeno. La aplicación de este tipo de geles minimiza la aparición de microorganismos que puedan acceder a nuestro organismo y causarnos daño.
Una de esas lecciones que nos ha dejado la pandemia: la importancia de lavarse las manos.